Tras los primeros compases de la temporada, todo indicaba un resurgimiento del mejor Boonen, resurgimiento que mientras avanzaba la temporada se hacía más y más real. Las victorias en el E3 y en la Gent-Wevelgem le colocaban de nuevo como máximo aspirante a hacerse con la victoria en la prueba reina del calendario belga. Y para no decepcionar Tom llegó, vio y venció, logrando su tercera De Ronde, y convirtiéndose en el primer corredor en encadenar las tres victorias de la semana flamenca (E3, Gent-Wevelgem y Ronde van Vlaanderen). Puede ser que la caída de Cancellara le allanara el camino, pero ni Pozzato, ni Ballan, segundo y tercero en la línea de meta, le pusieron las cosas faciles.
Un fuga de quince corredores, entre los que estaban los españoles Peio Bilbao (Euskaltel) y Pablo Lastras (Movistar), fue la animadora de los primeros kilómetros, hasta que el primer paso por el Oude Kwaremont puso las cosas serias y la ventaja, que había sido de más de 5 minutos comenzó a desaparecer. Algunos kilómetros más adelante, y con los fugados con una ventaja inferior al minuto se produjo la mala noticia del día, con la caída de Cancellara tras un punto de avituallamiento, lo que le produjo una triple fractura en la clavícula y le deja sin poder participar en la París-Roubaix del próximo domingo. Tras la caída los fugados tuvieron unos kilómetros más para rodar en cabeza, aunque sin verdaderas opciones.
Una vez se produjo la reagrupación del pelotón, y con todos los favoritos en cabeza, una nueva caída dejó sin opciones a hombres como Freire, Boasson Hagen o Gilbert, dejando un grupo de diez en cabeza, Boonen, Paolini, Pozzato, Terpstra, Vanmarcke, Sagan, Flecha, Chavanel, Jerome y Ballan. La última ascensión al Kwaremont unió de nuevo al pelotón, momento que aprovechó Ballan para jugar sus cartas y abrir hueco, aunque con él se fue Boonen y poco más tarde se les uniría Pozzato, formando el trío definitivo que se jugaría la victoria en las calles de Oudenaarde.
En la larga recta final Ballan fue el primero que lanzó el sprint, aunque no pudo hacer nada frente a Boonen, al que Pozzato siguió de cerca aunque sin opciones reales de superarle.